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Ahora que muchos países están dando los primeros pasos para relajar las restricciones en las actividades sociales y comerciales impuestas por el cierre del Coronavirus, las organizaciones de todo el mundo están empezando a pensar en cómo tendrán que evolucionar y cambiar sus negocios en un mundo en el que la crisis sanitaria ha disminuido pero los efectos económicos del cierre seguirán estando muy presentes en la mente de todos.

Las organizaciones de una gran variedad de industrias se enfrentan en este momento a una serie de retos como consecuencia de la crisis de COVID-19: reducción del personal o de equipos completos de personal que trabajan desde casa, obligaciones de proteger la salud de los trabajadores mediante el distanciamiento, enormes caídas en la demanda de algunos productos o servicios, picos repentinos en la demanda de otros, y mayor necesidad de generar eficiencias en los procesos para impulsar la productividad y reducir los costes en la medida de lo posible.

La mayoría de los expertos coinciden en que la crisis del coronavirus ha creado un cambio fundamental y duradero en la forma de operar de las empresas, y que es poco probable que muchas organizaciones puedan volver a "como estaban las cosas" probablemente durante muchos meses o incluso años. Sin embargo, también tienen una oportunidad única de aceptar los cambios en sus negocios que les ha impuesto la situación, y de reevaluar y reingeniería de sus procesos operativos para encontrar esas eficiencias clave y seguir siendo competitivos, algo que sólo será posible con la automatización. No se trata sólo de reducir los costes y hacer más eficientes los procesos, sino también de hacer que la continuidad de la empresa sea más resistente en el futuro al tipo de perturbación que esta crisis ha causado.

El despliegue de soluciones RPA puede y será un elemento clave para las empresas con visión de futuro que quieran seguir ese camino. RPA es la forma perfecta de cambiar un proceso heredado e incluso antes de la crisis de COVID-19, la RPA ya estaba cambiando las operaciones comerciales en muchos escenarios empresariales diferentes, desde las funciones de atención al cliente hasta la contabilidad, pasando por las operaciones de recursos humanos. Las empresas y organizaciones se sienten atraídas por la creciente escalabilidad, diversidad y flexibilidad de las aplicaciones de RPA y una de las cosas que ha hecho esta pandemia es crear una mayor conciencia de la necesidad de flexibilidad.

En este momento, la Automatización Robótica de procesos está siendo utilizado por muchas empresas y organizaciones para cubrir sus necesidades inmediatas durante la crisis sanitaria. UiPath está ayudando a varias organizaciones de salud en todo el mundo que están en la primera línea de esta pandemia a automatizar la notificación de las pruebas de COVID-19, la adquisición de suministros, el procesamiento de los datos de los pacientes y el reclutamiento de voluntarios y personal de salud.

De igual modo, empresas de otros sectores como el de los viajes, el comercio minorista y los servicios financieros están utilizando la RPA para gestionar un volumen de trabajo sin precedentes en los centros de llamadas, ya que los clientes solicitan reembolsos por vuelos cancelados, reclamaciones de seguros y préstamos para pequeñas empresas, así como para gestionar sus propias cuestiones operativas internas, como las solicitudes de licencia por enfermedad del personal, y para garantizar que todos los empleados estén equipados y sean capaces de trabajar desde casa.

Mirando hacia el futuro, cuando la pandemia haya remitido, es probable que las organizaciones reflexionen sobre las dificultades de pasar a una fuerza laboral muy dispersa y a compromisos con los clientes casi totalmente digitales, con nuevas ideas sobre cómo posicionarse adecuadamente para el mundo post-COVID y navegar a través de los efectos económicos a largo plazo de la crisis. Muchas empresas ya han dicho que continuarán con su actual política de "Teletrabajo" de forma permanente a partir de ahora, mientras que las nuevas políticas y procesos de RRHH, como la incorporación de nuevo personal, tendrán que hacerse a distancia.

Será una oportunidad única para evaluar de cerca los procesos que deben ser automatizados, los que deben serlo y los que no pueden serlo todavía y por qué. Será más importante que nunca alcanzar el máximo rendimiento en el mayor número posible de procesos, reduciendo al mismo tiempo los costes y las ineficiencias al mínimo para seguir siendo competitivos.

Cualesquiera que sean los cambios que hagan, para estar preparados para el futuro, tendrán que ser flexibles y adoptar la automatización para aumentar la velocidad de los procesos con el fin de cubrir las lagunas de la demanda y la oferta.

Asequible y accesible a empresas de todos los tamaños y fácil de integrar en los sistemas heredados, RPA puede apoyar un entorno de trabajo dinámico en el que los propios empleados pueden volver a capacitarse y aprender a crear y trabajar con robots de software a medida que los modelos de operación experimentan cambios.




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