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  • Muchas son las dudas que asaltan a los trabajadores en situaciones de despido. Una de ellas es saber si deben tributar la indemnización por despido recibida cuando concluye la relación laboral.

Según el marco legal del Estado español existen 3 tipos de despidos:

  • Despido disciplinario: a causa de una sanción impuesta por la empresa por haber cometido una falta muy grave. No tiene derecho a indemnización.
  • Despido objetivo: está justificado por causas técnicas, económicas u organizativas de la empresa. El trabajador debe ser avisado con 15 días de antelación y le corresponde una indemnización de 20 días de salario por año trabajado.
  • Despido improcedente: se da cuando la empresa no puede demostrar las razones objetivas del despido o cuando no se ha seguido el procedimiento de la forma correcta. En este tipo de despidos al trabajador le corresponde una indemnización de 33 días por año trabajado. Otra opción por la que puede optar el trabajador en este tipo de situaciones es por la readmisión en el puesto de trabajo.

No hay que confundir la indemnización por despido con el finiquito, que incluye la parte del salario no percibido hasta el momento del despido, las vacaciones y las pagas extraordinarias que aún no se hubiesen cobrado o disfrutado.

Llegados a este punto, ¿deben tributar los trabajadores que han recibido una indemnización por despido? A priori no. Las indemnizaciones por despido están exentas de cualquier pago de impuestos a Hacienda o a la Seguridad Social siempre y cuando no excedan la cantidad estipulada en el Estatuto de los Trabajadores. Para que la exención sea efectiva, la indemnización debe ser reconocida por el SMAC –Servicio de Mediación y Arbitraje y Conciliación-, en el juzgado social o a través de una sentencia judicial.

En el hipotético caso de que la empresa y el trabajador llegasen a un acuerdo extrajudicial, el trabajador sí estaría obligado a tributar y a abonar una cuantía por IRPF.

En ocasiones, las empresas, para evitar problemas, deciden pagar al trabajador una cantidad superior a la que le corresponde en la indemnización. En ese caso, también deberá tributar la parte que exceda a la cantidad estipulada añadiéndola, prorrateada, a la base de cotización del trabajador para hacer los cálculos.

Por qué es importante contribuir con la Seguridad Social

La Seguridad Social es el organismo sobre el que se sustenta el estado del bienestar español. Es un sistema que pretende apoyar a aquellos ciudadanos que se encuentran en situación de necesidad.

La actual crisis sanitaria provocada por el coronavirus ha puesto de manifiesto la importancia de contar con un sistema sanitario público de calidad, de forma que el Estado pueda velar por la salud de sus ciudadanos. De la Seguridad Social salen también los pagos de las bajas laborales.

Después de toda una vida de trabajo y de contribución, a todos nos llega la hora de la jubilación. Las pensiones de jubilación salen de las arcas de la Seguridad Social del mismo modo que también lo hacen las prestaciones por desempleo.

Las personas con discapacidades encuentran más dificultades para acceder al mundo laboral y desempeñar determinadas funciones que otras personas que no cuentan con discapacidad. Es responsabilidad de la Seguridad Social que esas personas que no pueden acceder al mercado laboral sí puedan recibir una asignación económica con la que poder vivir.




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